La endometriosis y todos los síntomas que conlleva es una de las consultas más habituales en nuestro centro de Toledo.
Es una enfermedad bastante común en edad reproductiva, aunque, no todas las pacientes que presentan estos síntomas van a ser subsidiarias de entrar en nuestra unidad de reproducción, si un porcentaje no desdeñable va a tener que acudir a nuestras consultas, ya que entre un 30 % a un 50 % de las pacientes con endometriosis pueden necesitar tratamientos de fertilidad.
¿Cómo afecta la endometriosis a la fertilidad de la mujer?
La idea de tener endometriosis nos debe hacer más precavidas en cuanto a nuestra capacidad reproductiva y puede ser necesario acudir a alguna consulta informativa en las unidades de reproducción por si fuera necesario ser ayudada.
La endometriosis se define como un paso del tejido endometrial, tejido que nosotras tenemos en el útero y que se descama cada mes y produce la regla a la cavidad abdominal.
Las zonas del abdomen donde con más frecuencia se encuentra la endometriosis es en ovario, produciendo unos quistes llamados endometriomas en el útero, produciendo la adenomiosis- son placas que se localizan en la zona del músculo uterino y producen inflamación y dolor abdominal intenso.
La endometriosis puede localizarse en zonas menos frecuentes como: recto, vejiga, ombligo, vagina e incluso pulmones.
La endometriosis produce esterilidad por diferentes causas:
- Por causas anatómicas: al producir crecimiento de tejido endometriósico cerca de las trompas, se producen adherencias a nivel tubárico, pudiendo producir obstrucción o rigidez de estas, dificultando el paso del óvulo y la unión que se produce entre él y el espermatozoide en la trompa. Esos mismos depósitos a nivel ovárico producen disminución de la cantidad de tejido ovárico sano y producen inflamación de la zona, lo que conlleva a una reducción de la cantidad de los óvulos (baja reserva ovárica) y una peor calidad ovocitaria por el proceso inflamatorio a los que se encuentran expuestos los ovocitos.
- Otra causa es por la inflamación que produce, también puede disminuir la receptividad endometrial dificultando que el embrión se implante de una forma sencilla.
Las unidades de reproducción somos poco agresivos en el tratamiento de la endometriosis y preferimos realizar un tratamiento de reproducción sin realizar una cirugía previa a la paciente a no ser que sea estrictamente necesario (endometriosis muy avanzadas que nos impidan acceder a los óvulos de la paciente, o fracasos previos de tratamiento de reproducción).
Somos conservadores en cuanto a la cirugía ya que hemos comprobado que la cirugía en múltiples ocasiones reduce la reserva ovárica de nuestros pacientes, disminuyendo el número de óvulos que obtenemos en un tratamiento y así las oportunidades de conseguir un buen embrión y un embarazo.
Tratamientos para facilitar la reproducción.
En cuanto a los tratamientos que realizamos en nuestras unidades a estas pacientes son los siguientes:
Es la técnica más sencilla usada en reproducción asistida. Estimulamos el ovario a bajas dosis hormonales para producir la ovulación controlada y unir al semen del varón.
Es una técnica poco eficaz en pacientes con endometriosis y solo se realiza si la paciente es muy joven y la endometriosis es muy leve.
Técnica cada vez más utilizada en nuestra unidad de reproducción de Toledo, lo que consigue es guardar óvulos para un futuro. Se recomienda en mujeres con endometriosis, ya que, si somos capaces de guardar ovocitos a edades tempranas, la tasa de éxito será mayor cuando la mujer decida ser madre a edad más avanzada y además las posibles complicaciones debidas al aumento de la endometriosis por el paso del tiempo, serán minimizadas.
La técnica más utilizada en este tipo de pacientes, ya que como hemos comentado anteriormente, en muchas ocasiones nos encontramos con bajas reservas ováricas o mala calidad del óvulo, y es esta técnica la que nos ayuda a este diagnóstico y a aumentar las tasas de embarazo. Es una técnica muy utilizada hoy en día y de la que todos hemos oído hablar.
Técnica usada cuando fallan las técnicas anteriormente expuestas o cuando la reserva ovárica de nuestras pacientes son tan malas que no nos permite el uso de óvulos propios.