El aborto es una experiencia emocionalmente muy dolorosa y que en algunos casos, incluso es complicado compartir con el resto de personas de alrededor puesto que los pacientes no se sienten comprendidos.
Afrontarlo emocionalmente puede ser difícil, se necesita tiempo, espacio y apoyo. Además, según cada paciente la forma en que lo va a gestionar va a ser completamente diferente. Pero, sí contamos con ciertas estrategias que pueden ayudarnos a manejar emocionalmente esta situación:
- Observar cómo nos sentimos y validar nuestras emociones: en este momento todas las emociones que podamos sentir son completamente normales, y dependen de cada paciente y vivencia; hay pacientes que sienten miedo, tristeza, culpa, alivio o a veces confusión ante lo ocurrido y el futuro. Cualquiera de estas emociones es totalmente válida. Es importante que dejemos sentir la emoción que aparezca sin intentar presionarnos para sentir cualquier otra o negar cómo nos estamos sintiendo. Aceptar nuestras emociones es importante para poder procesarlas.
- Hablar con alguien de confianza: poder expresar y compartir cómo nos sentimos con un amigo, familiar o con nuestro psicólogo puede proporcionar alivio. Hablar de lo que estamos sintiendo y cómo lo gestionamos puede ayudar a poner en palabras una situación difícil de procesar.
- Buscar apoyo profesional: cuando la situación se nos hace muy complicada de manejar o sentimos que nos sobrepasa es importante buscar ayuda profesional para poder explorar de forma segura cómo sentimos esa situación y poder tener estrategias para afrontar el duelo o algunas emociones más complicadas.
- Buscar momentos para el autocuidado: es importante poco a poco volver a sacar ratos para cuidar tanto el bienestar físico como el emocional. Poder mantener una correcta higiene del sueño, comer adecuadamente, evitar ciertas presiones externas, tener tiempo para nosotros mismos y poder hacer actividades que nos motiven y relajen.
- Evitar los pensamientos negativos: el hecho de sentir culpa y vergüenza es algo muy común, pero es importante ser consciente de que los pensamientos negativos que aparecen y el discurso interno que tenemos con nosotros mismos puede ser más nocivo de lo que pensamos. Castigarnos aumenta la sensación de sufrimiento.
- Permitirse tiempo para sanar: La sanación emocional no es inmediata, y puede llevar tiempo procesar lo ocurrido. Cada persona necesita un tiempo distinto para poder encontrarse bien o mejor.
- Considerar un grupo de apoyo: a veces, nos ayuda buscar y unirnos a grupos de apoyos en donde podamos encontrar ese espacio en el cual compartamos las experiencias vividas y podamos vivir la situación con una mayor comprensión.
- Tener presente que cada proceso es único e individual: no podemos describir una única manera de vivir un aborto, ya que cada persona lo vive de una manera distinta. Cada proceso es único, y eso también es válido, aunque a veces no coincida con otras vivencias.
Es importante tener presente que es un proceso personal, y no existen respuestas fáciles o rápidas. Hay que tener siempre en cuenta que si en algún momento sentimos que las emociones nos superan o no sabemos cómo hacer para manejarlas debemos buscar ayuda profesional para poder superar el proceso de forma sana.